Introducción
La creación de la Agencia
Internacional de Energía (AIE) en 1974 fue un intento por parte de
los países importadores del petróleo para establecer políticas
energéticas eficientes y disminuir la dependencia de la importación
del petróleo a sus países.
Inicialmente la Agencia Internacional de Energía la conformaron
países importadores de petróleo, sin embargo, actualmente más del
60% de los países que consumen petróleo a nivel mundial no forman
parte de la Agencia. Derivado de lo anterior la AIE ha optado
por desarrollar una línea de acción, cuyo objetivo es encontrar
soluciones a problemas comunes entre países miembros y no miembros
en materia de energía y medio ambiente.
Cada año, la Agencia Internacional de Energía (AIE) presenta su
Panorama Mundial de la Energía, en el cual se detalla el porvenir
del sector energético mundial.
De acuerdo a los datos oficiales publicados por AIE en el año 2040
la demanda total de energía en el mundo incrementará 30%, y la mayor
parte de este consumo vendrá de los países en desarrollo.
Actualmente alrededor del 23% de la energía eléctrica consumida en
el mundo es generada por fuentes renovables, específicamente por
energía eólica y solar. De acuerdo al AIE se espera que para el 2040
aumente al 37 % a nivel mundial.
En el presente ensayo se abordará el tema de la generación de
energía convencional y alternativa en el mundo, principalmente la
generación de energía eléctrica, el estado actual de sus
sistemas y tecnologías empleadas.
Desarrollo
Es imperativo conocer a profundidad
los pros y contras de las diferentes tecnologías energéticas para
minimizar el impacto negativo en el propio entorno al seleccionar,
usar, racionalizar y aprovechar las energías empleadas en el día a
día.
Para clasificar las distintas fuentes de energía se pueden utilizar
varios criterios:
Según su grado de disponibilidad: convencionales o en desarrollo.
Según sean o no renovables.
Según sea su utilización las fuentes de energía las podemos
clasificar en primarias y secundarias:
Las primarias son las que se obtienen directamente de la naturaleza,
como el carbón, petróleo y gas natural.
Las secundarias, llamadas también útiles o finales, se obtienen a
partir de las primarias mediante un proceso de transformación por
medios técnicos. Es el caso de la electricidad o de los combustibles
derivados del petróleo.
Fuentes de energía convencionales
Las fuentes de energía convencional podrían definirse cómo
aquellas fuentes más comunes para producir energía eléctrica o
aquellas que se encuentran en cantidades limitadas en la
naturaleza.
Dentro de estas energías que son las más usadas en el planeta se
encuentran los combustibles fósiles cómo; petróleo, carbón y gas que
son extraídos desde su lugar de origen y transportados hasta las
centrales de generación en las que son quemados para producir
energía eléctrica o térmica.
Los equipos que normalmente son utilizados en estos procesos de
producción de energía a través de fuentes fósiles son: calderas o
cámaras de combustión donde se quema el combustible para producir
vapor o calentar el gas, en esta etapa el vapor o el gas a altas
temperaturas se hace pasar por una o varias turbinas las cuales
pueden producir trabajo.
Al mismo tiempo que las turbinas reciben el vapor o gas a altas
temperaturas produciendo trabajo, se encuentran acopladas a un
generador eléctrico cuyo propósito es convertir el trabajo en
energía eléctrica.
A pesar de su gran importancia en los sistemas eléctricos, una de
las principales desventajas de las energías convencionales es la
generación de contaminantes a través de emisiones de contaminantes y
residuos. Provocando paulatinamente el calentamiento del planeta.
Actualmente se han desarrollado tecnología para aprovechar las
fuentes de energía convencionales de una manera más eficiente,
sostenible y respetuosa con el medio ambiente, tales como la
cogeneración, la cual se presenta como una solución que genera
simultáneamente energía eléctrica y calor para el consumo industrial
y abastecer a terceros con los excedentes. En este mismo sentido, se
ha desarrollado la tecnología de plantas de ciclo combinado las
cuales combinan el potencial de la combustión directa de gas y el
vapor producido resultante de la reutilización de los propios gases
de la combustión para producir energía eléctrica.
Otra fuente de energía convencional es la nuclear, los combustibles
nucleares son aquellos materiales que pueden ser empleados para
generación de energía nuclear, bien sea en estado puro (fisión) o al
mezclarse con otro componente (fusión).
Este tipo de generación tiene lugar debido a las reacciones que
ocurren en el núcleo atómico de los combustibles nucleares. Los
combustibles nucleares más empleados en la actualidad son el
plutonio y el uranio.
Según información del Programa de Desarrollo del Sistema Eléctrico
Nacional 2021-2035, la Comisión Federal de Electricidad en México
genera y compra, en su mayoría, dos tecnologías para generar
electricidad con energías convencionales.
La tecnología que ocupa el mayor porcentaje para producir energía
eléctrica en México es el Ciclo Combinado, en un 39.2 % de la
energía eléctrica producida en el país.
En segundo lugar para producir energía eléctrica en México se emplea
la tecnología térmica o termoeléctrica con un 13.2 %, utilizando
cómo combustibles principalmente el carbón o el petróleo. Siendo
esta la tecnología empleada para producir energía eléctrica a partir
de fuentes convencionales más contaminante.
Según el Laboratorio Nacional de Energía Renovable, la electricidad
generada con precursores fósiles (carbón, petróleo) cuesta
producirse entre 5 y 17 de dólar por kilowatt-hora.
Fuentes de energía alternativas o renovables
Las energías alternas o renovables son aquellas obtenidas por
fuentes naturales, las cuales son relativamente inagotables. Entre
las energías renovables se encuentran la eólica, geotérmica,
hidroeléctrica, mareomotriz, biomasa, solar etc.
Las energías alternas o renovables son presentadas a través de
distintas tecnologías que aprovechan los recursos renovables como
materia prima para su funcionamiento. Esta materia prima se extrae
del poder del sol, el viento, el agua, la biomasa, las mareas etc.
como combustibles para generación energética, tanto eléctrica como
térmica y frio.
La energía hidroeléctrica es la segunda tecnología que más produce
electricidad en México con un 14.1% del total y la primera
tecnología a partir de fuentes consideradas no convencionales a
nivel nacional.
La energía eólica se produce a partir de la fuerza de los vientos
convirtiendo la energía mecánica que mueve las aspas de los
aerogeneradores y convirtiendo esa energía en electricidad. La
energía eólica produce el 8.6 % de la energía eléctrica del
país.
La energía que proviene del sol se aprovecha a través de la
tecnología fotovoltaica utilizando paneles solares con los que se
recolecta el potencial eléctrico captando la radiación solar y
convirtiéndola energía eléctrica.
En el país se tiene una generación a partir de esta tecnología del
7.99 %, se considera que este tipo de producción de energía a partir
de fuentes renovables es la más eficiente y barata
actualmente.
La energía mareomotriz es la energía obtenida de partir de la fuerza
que generan las olas del mar y suelen ser aprovechada en las costas.
La acción de la fuerza de las olas que interactúa con un mecánismo
que se encuentra conectado a un generador eléctrico permite
convertir esa fuerza mecánica en energía eléctrica.
El proceso de degradación de residuos orgánicos aislados del oxígeno
permite la producción del biogás. Este es un gas combustible con
alto contenido energético, empleado en la generación de energía
eléctrica.
En México a pesar de que se cuenta con amplias zonas costeras no se
tiene generación de energía eléctrica a partir de esta fuente
renovable.
La energía geotérmica se obtiene a partir de yacimientos ubicados
debajo de la superficie done se presentan altas temperaturas debido
al proceso de fusión de las rocas.
Estas altas temperaturas debajo de la superficie interactuan
produciendo agua caliente la cual se puede utilizar directamente o
direccionar a centrales geotérmicas que permitan transformar esa
energía térmica en energía eléctrica.
La obtención de energía a través de fuentes alternas o renovables
conllevan una menor generación de contaminación.
Se ha encontrado que los costos de producción de energía a partir de
fuentes renovables es más económico por ejemplo con la radiación
solar, el costo de producción se calcula en un intervalo de 3 a 6
centavos de dólar por kilowatt-hora.
Conclusiones
El uso masivo y constante de las energías convencionales, ha
provocado que los gobiernos tengan que tomar cada vez
más, la determinación de hacer políticas para restringir su
uso masivo y fomentar el desarrollo de otras políticas energéticas
más respetuosas con el medio ambiente.
Uno de los principales retos a los que se enfrenta la industria
energética hoy en día es reducir su impacto medioambiental y
garantizar una producción de energía suficiente para cubrir las
crecientes necesidades de la población.
Contar con el poder del sol, el viento, el agua entre otros para la
generación energética mediante el manejo de distintas tecnologías es
la clave para enfrentar la crisis energética mundial de forma
responsable y equilibrada.
Desgraciadamente, las energías renovables no dominan el mercado,
puesto que su tecnología llegó después de que las energías
convencionales ya fueran parte de la economía mundial.
Sin embargo esa tendencia tendrá que ser revertida ya que será
necesario cumplir con los objetivos de la agenda ambiental
internacional y/o los costos que actualmente se ha determinado que
es más barata la energía a partir de fuentes renovables que
las fuentes convencionales. Así mismo se deberán destinar mayores
recursos económicos por parte de los gobiernos para el desarrollo de
nuevas tecnologías renovables para producir energía como el
Hidrogeno.
M. en Ing. J. Carlos Muñoz.
Perito en Protección Ambiental 581 CONIQQ
M. en I. Ambiental